A nadie le cabe duda que este 2020 ha sido un año pésimo. Ha pasado de todo y todavía estamos encerrados. La llegada de una vacuna es signo de esperanzas para algunos y temor para otros. En medio de este panorama siempre hay alguien que nos levanta el ánimo con un mensaje esperanzador. Les presento a Manuel Enrique.
La meditación es en mi opinión la llave en todos los caminos espirituales para conectarnos con nuestro ser. Cuando meditamos y nos conectamos, estamos buscando en la fuente de toda creación y en la sabiduría inherente que habita en nosotros, esa sabiduría que nos da la vida y la consciencia de ser. No importa el camino espiritual que profesemos. Incluso, sin tener un camino espiritual, por medio de la meditación podemos obtener la guía necesaria para que nuestra vida esté calmada, serena, con más sabiduría y mayor consciencia en nuestro diario vivir.
Como en años anteriores, nuestro hermano Ratziel ha preparado el calendario para el próximo año 2021.
Ya habíamos trabajado con esta información anteriormente. Es un tema que a muchos le llamó la atención, así que decidimos volver a reforzarla.
Como compartimos en nuestro tratado de Ocultismo todo es energía y manifestaciones de ella. La energía se manifiesta en formas que conocemos y desconocemos. La energía se puede mover a voluntad, y esa energía tiene consciencia. Le hablamos y nos responde. Las diferentes religiones del mundo interactúan con esa consciencia de formas diferentes. Todas las religiones utilizan ritos para conectarse con esa energía y en cada rito incluyen una serie de creencias desarrolladas en base a sus culturas, historias y formas de percibirla. Cada religión la personifica en base a sus deidades. Cada deidad es un símbolo que representa cualidades de esa energía con unos propósitos en particular.
Cada región tiene su forma de invocar la energía y el Vudú es una de esas religiones que tiene definida sus formas de invocarla y manipularla buscando ciertas manifestaciones.
